Cros de Canovelles

Siguiendo en la línea de resultados de esta temporada ayer me fui de Canovelles con muy buen sabor de boca. 

El de Canovelles es un cros corto, de 4.150 metros, pero no por ello menos duro que otros más largos, de hecho, es bastante intenso.

Los 4.150 metros están divididos en 3 vueltas: la primera a un circuito pequeño de 550 metros y dos más a otro más grande de 1.500. Las tres vueltas tienen en común una primera parte en subida bastante importante pero después de esto es casi todo bajada y llano excepto algún repecho. 

Empecé un poco rápido, con un primer kilómetro a 3:21 min/km, no me di cuenta de que iba tan rápido y supongo que inconscientemente bajé el ritmo; velocidad de crucero a 3:40 el mil que mantuve durante los dos kilómetros siguientes. Hacia el cuarto más o menos hice un cambio, motivado por que me atraparon dos atletas: primero uno del C.N. Caldes seguido de otro del Cornellà Atlètic y no me quise despegar, por lo menos del segundo de ellos, que el primero me pasó como un avión y me quedaba un poco lejos. El plan era aguantar hasta el final y cambiar de nuevo a ver si podía pasarle. El cuarto kilómetro salió a 3:25.

Íbamos llegando a meta y me notaba bastante cansado, sin muchos ánimos para intentar el ataque pero escuché a Mónica (gracias guapa) que desde fuera gritaba "¡Venga Pereeeee! ¡Apretaaaaa!". Esto me dio fuerzas para intentarlo. Y vaya si cogí al del Cornellà, como que pasé incluso al del Caldes que tenía bastante lejos ya. Lo que es la mente.

Completé la prueba en 14:26 lo que no está nada mal para 4.150 metros, de hecho es la primera vez que tengo un promedio de ritmo de 3:28 min/km en una prueba de fondo.

Respecto a posición, 22 de 67 de la general (corrimos cadetes, juveniles, juniors, promesas, senior y veteranos a la vez) y 8 de 16 de mi categoría.